VIOLENCIA
Sábado 13, Junio:
Llegamos en la madrugada de ayer, supongo que a eso de las cuatro, pero no estoy seguro porque odio usar los relojes. Estar consciente de la existencia del tiempo alarga el recorrido y yo quiero volver pronto a casa. Dentro pocos días será la presentación y por fin todo está listo. Estos días, más que estresantes, serán cansados y agotadores. He tomado la manía de rascarme el cuello mientras leo, desgraciadamente suele ser mucho porque paso en los cuartos con las letras practicando mis voces; Rony me golpea en la mano cada vez que me encuentra haciéndolo. Sin embargo, mientras más se acerca el día, más comezón siento en toda la piel.
Martes 16, junio:
Hoy es la presentación y yo estoy muriendo. No me atrevía a salir del cuarto del hotel, los primeros días no tenía importancia porque practicaba con Rony, solo la guitarra y yo; pero ayer no podía quedarme por la maldita prueba de sonido y la práctica performática de la presentación. Mientras iba en el auto, dirigiéndonos al Teatro de las Tres Lunas, sentí que me quemaba el brazo, por encima del codo. Al revisarme noté una gran mancha roja en la manga de mi camisa. Remangué la prenda y vi en mi brazo derecho prácticamente dos centímetros donde no tenía piel; mi sangre corría rápidamente como si deseara escapar del peligro de mi cuerpo. Le dije a Rony que me ayudara y él pidió una venda. Travis e Ian me preguntaban qué sucedió, pero yo no sabía qué responder. Mientras Ian me vendaba, Rony notó sangre en mis uñas de la mano izquierda y me dijo –Cojudo de mierda. Me obligó a que le mostrara el cuello, donde me dijeron que tenía varios rasguños junto con unas costras largas y finas. A lo que llegamos al teatro me dijo –Déjate de huevadas y tus miedos pendejos, te juro que cada vez que te vea rascándote ya no te voy a golpear la mano, sino la cabeza.
Hoy tengo moretones en las manos por los golpes de Rony, costras grandes en los brazos, pedazos de piel en mis manos y sangre entre mis uñas. Rony me prometió que buscaría algo para que me calmara antes de nuestra presentación. Solo espero que todo salga bien.
Miércoles 17, de junio
El concierto fue mejor de lo que esperaba, el vodka que consiguió Rony me ayudó, quizás demasiado. Él todavía me golpea cuando me encuentra quitándome las carachas y un poco más de carne; pero no siento que lo haga, sólo me asusto cuando veo la sangre llegar al suelo. En todo mi brazo hay rasguños y heridas que, si esto continúa, podrían llegar a considerarse graves. Para colmo, el vodka, además de quitarme el miedo de presentarme frente al público me vuelve algo violento; por esta razón le lancé el pedestal del micrófono a Ian, quien por suerte lo detuvo con su bajo y no dejó que lo golpeara. No sé si quisiera decir que recuerdo haberlo hecho, realmente no recuerdo. Sin embargo, creo que necesitaré alcohol para la siguiente presentación; eso sí, espero poder controlarme más. Ian quiso golpearme cuando se terminó el concierto y su hermano, Travis, me puteó y me dijo que estaba loco. Rony los calmó diciendo que no pasó nada malo y que "a la mierda", al público le gustó verlo. Creo que también Travis no se atrevía a golpearme porque el único lugar donde no tengo heridas graves es la cara. Ian se sentía insultado y me golpeó debajo del ojo, me gustaría haber respondido, pero fui directo al suelo y muchas de mis heridas sangraron nuevamente. Pero igual, parece que no necesito de terceros para hacerme daño.